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VIE 30 ABR 2021 | PRESIDENTES
LaLiga y los clubes rechazan la liga secesionista: “El problema es de gastos, no de ingresos”
LaLiga y los clubes rechazan la liga secesionista: “El problema es de gastos, no de ingresos”
  • Los 39 clubes que no fueron invitados a formar parte de la European Super League se unieron para oponerse unánimemente al movimiento.
  • En declaraciones a los medios internacionales, Javier Tebas y cinco presidentes de clubes destacaron la necesidad de colaboración y responsabilidad financiera para todo el fútbol.

La amenaza de una nueva competición rupturista que separe a los clubes más ricos del resto de la pirámide lleva presente muchos años en el fútbol. En este tiempo, LaLiga y otros líderes del fútbol se han opuesto enérgicamente a la idea, trabajando con las partes interesadas de toda la industria para insistir en la necesidad de mantener la integridad deportiva en el sector.

Como consecuencia de ello, cuando finalmente se presentó la propuesta de una competición secesionista, se encontró con una respuesta internacional rápida y contundente.

“Llevamos oyendo hablar de una liga secesionista durante 25 años, pero cuando se llegó al punto crítico, en 48 horas se disolvió como un terrón de azúcar”, declaró el presidente de LaLiga, Javier Tebas, en una rueda de prensa a la que asistieron cientos de medios internacionales. “Los aficionados se movieron muy rápido y los políticos, incluso algunos presidentes, también se implicaron”.

Para explicar el peso de la oposición frente al proyecto y discutir los próximos pasos que se deberían seguir en la industria del fútbol, Tebas se dirigió a los medios de comunicación junto con los presidentes del Levante UD, Real Betis, Sevilla FC, Valencia CF y Villarreal CF, que señalaron las reglas fundamentales del fútbol europeo que deben mantenerse: mérito deportivo, relación con los aficionados y responsabilidad económica.

Mantener vivo el sueño

Una de las principales preocupaciones acerca del plan de ruptura era la naturaleza cerrada de la competición. Es decir, los equipos más grandes estarían protegidos del descenso y mantendrían su lugar independientemente de su rendimiento, a expensas de otros. Como explicaron los asistentes de los clubes, este era un principio que debilitaba seriamente el proyecto.

“Todos los equipos deberían tener la oportunidad de llegar a lo más alto y no podemos destruir esto”, dijo José Casto, presidente del Sevilla FC. “Nos ganamos nuestro prestigio en el terreno de juego y queremos que siga siendo así”.

“El planteamiento también dejó fuera al principal protagonista, la afición”, añadió el presidente del Real Betis, Ángel Caro. “Esto habría destruido los sueños de los aficionados y clubes de poder jugar algún día en las mejores competiciones”.

Aparte de esto, los 39 clubes de LaLiga no invitados a unirse a la liga secesionista emitieron un comunicado conjunto rechazando unánimemente el formato, destacando que “una liga cerrada y elitista es inviable e indeseable”.

“Esperamos que los que siguen a favor de ello reconsideren su postura”, continuó diciendo Anil Murthy, presidente del Valencia CF. “Esto ha perjudicado al fútbol. Deberíamos analizar cómo avanzar de manera conjunta”.

“Una liga de Power Points”

Otra de las críticas clave hacia la liga rupturista fue su planificación económica. Además de prometer en varias ocasiones los premios en metálico de las competiciones europeas existentes, el proyecto afirmó que llegaba al rescate de la industria, con declaraciones generales sobre apoyar una pirámide más amplia, el fútbol base y el deporte femenino.

“Si fuera tan bueno para el fútbol no lo habrían hecho a nuestras espaldas de manera oculta”, afirmó Tebas. “En particular, las cifras económicas están inventadas, es una liga de Power Points. No hay tanto dinero en los derechos televisivos de todo el mundo para pagar lo que prometen. Así que todo es una mentira”.

La metáfora de la pirámide planteada por la liga secesionista, donde se decía que si esos clubes de arriba tenían dinero fluía a hacia abajo a los demás, fue descartada por Francisco Catalán, presidente del Levante UD. “La idea del chorreo -económico- no es realista”, comentó. “Para que alguien se convierta en campeón de liga necesita el apoyo de todos los demás que están jugando. Tal vez podría funcionar a corto plazo, pero a largo plazo sería un fracaso”.

También se cuestionó la imagen negativa del actual estado económico del fútbol. “El fútbol español no ha dependido de subvenciones externas durante la crisis de la covid-19”, añadió Fernando Roig, presidente del Villarreal CF. “El real decreto aprobado en España ha dado a todo el mundo la oportunidad de poder competir mejor. Todavía se está cerrando la brecha, pero todos estamos trabajando para controlar nuestros ingresos y gastos”.

“Los clubes más grandes tienen infraestructuras más grandes y más gastos, lo que supone mayores gastos generales”, explicó Tebas. “Pero sus ingresos habían seguido creciendo con el paso del tiempo antes de la covid-19. No habían generado pérdidas antes de la pandemia. Me gustaría que los organizadores de la liga separatista analizaran esto adecuadamente”.

Avanzar juntos

Respecto a las medidas que se pueden adoptar para el avance de la industria, los asistentes recalcaron la necesidad de que la responsabilidad financiera vuelva al primer punto de la agenda en todo el fútbol europeo. Esto contradice las afirmaciones hechas por los organizadores de la liga secesionista de que los clubes más grandes necesitaban más ingresos iniciales para mantenerse.

“Esta pandemia no ha afectado únicamente a los clubes de fútbol, sino a toda la actividad empresarial”, explicó Roig. “A medida que los ingresos bajan, tienes que gestionar los costes y trabajar de forma más inteligente. Esto es una condición para todos”.

“Lo que tenemos que aprender es a salir de esto con solidaridad y cooperación, que no es lo que manifestaba la liga separatista”, agregó Haro. “No deberíamos buscar aumentar los ingresos en la parte superior, sino controlar los costes”.

LaLiga ha mantenido su sistema de control económico a lo largo de la pandemia para garantizar que el gasto de todos los clubes españoles se mantuviera en línea con los ingresos. Tras haber sido nombrado recientemente miembro del Comité Ejecutivo de la UEFA, Tebas planea seguir promoviendo este enfoque en las ligas de toda Europa.

“El problema no son los ingresos”, dijo Tebas. “Si los grandes clubes ganan más dinero, querrán todavía más. Deberían controlar sus gastos, no centrarse en los ingresos. El gasto debe controlarse mejor y la riqueza debería dividirse de forma más equitativa entre los clubes”.

A pesar de describir la actual propuesta rupturista como “muerta”, Tebas se centra en garantizar nuevas medidas que preservarán y reforzarán el modelo de fútbol europeo para la próxima generación.

“Estamos buscando medidas de protección y regulaciones para impedir que esto vuelva a suceder”, afirmó. “Todo el ecosistema del fútbol europeo debe definirse por el mérito deportivo”.

“Cuando un club más pequeño llega a una gran semifinal o final europea, esto es lo que sueñan los aficionados. Esto vale más que cualquier beneficio económico a corto plazo”.

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