Fútbol Global

El crecimiento global del CA Osasuna se manifiesta también en redes sociales. En los últimos meses, el club ha dado un salto muy relevante en sus diferentes plataformas digitales para acercarse aún más a los aficionados y alcanzar nuevas audiencias. “A comienzos de la temporada apenas contábamos con 950.000 seguidores en todas nuestras redes sociales, y hace unos días superamos los 2 millones. Es un crecimiento increíble”, aseguran desde el club navarro.

Este dato tiene un valor significativo si tenemos en cuenta que hace muy pocos años el CA Osasuna solo contaba con una cuenta en castellano en Twitter, otra en Facebook y el canal de YouTube. “Hemos tenido que ir adaptándonos a los tiempos a medida que la gente ha ido utilizando unas redes u otras. Por ejemplo, hace unos años la gente joven empezó con fuerza en Instagram y nos adaptamos a ello y ahora ha ocurrido lo mismo con TikTok, solo que esta vez estábamos mejor preparados para responder de forma más rápida”.

TikTok es la punta de lanza del ecosistema de redes sociales de la entidad rojilla. El crecimiento es tan vertiginoso que, sirva como ejemplo, un dato que evidencia el incremento acelerado en el número de followers. Si bien el club publicaba el 19 de enero que tenía 891.300 seguidores en esta red social, tan solo unos días después hablamos de más de 950.000.

Para entender cómo ha logrado el club crecer en TikTok hay que remontarse a mayo de 2022, momento en el cual se detectó un rápido aumento de seguidores. Por entonces, y con visión estratégica, se planificó poner el foco en ella durante la temporada 2022/23. “Empezamos a generar más contenido en julio con la pretemporada del equipo y la creación de un departamento digital en el club, mucho más especializado. Después llegó el fenómeno viral de ‘Osasuna nunca se rinde’ y a partir de ahí hemos crecido muy rápido”, apuntan.

El ‘Osasuna nunca se rinde’ impulsa el aumento de followers y el alcance internacional 

Para poner en contexto la moda del ‘Osasuna nunca se rinde’, cántico con significado de resistencia que se escucha en El Sadar desde hace una década, hay que remontarse a 2017. En ese año el pamplonés Eneko Elósegui realizó un viaje solidario a Uganda y grabó un vídeo con unos niños de Uganda entonando el famoso cántico. Lo envió a su entorno más cercano sin pensar que podría alcanzar la dimensión actual: millones de reproducciones en TikTok, Instagram y YouTube han hecho que el video de apenas 20 segundos de la vuelta al mundo y sea entonado en excursiones y recreos por los niños de toda España e incluso en Sudamérica.

“Detectamos enseguida que ‘Osasuna nunca se rinde’ estaba funcionando muy bien en TikTok y en apenas unos días diseñamos con el área digital una serie de contenido para aprovecharlo. Hemos venido insistiendo con varios vídeos relacionados con este lema durante los últimos meses y eso nos ha permitido aprovechar alrededor del 15% del tirón mundial que el hashtag ha tenido en la red social”, detallan sobre el fenómeno viral.

Sin duda, este hecho ha sido entendido por el club como una oportunidad para conectar con un público más joven: “Evidentemente hemos tenido que preparar un contenido muy diferente para esta red y para una audiencia tan joven. De hecho, prácticamente todas las publicaciones están hechas específicamente para esta red social”. Gracias a este trabajo el perfil de TikTok del club está entre las cuentas más seguidas de los clubes de LaLiga.

Un 11,2% de los followers son de China

El CA Osasuna tiene perfiles en castellano, euskera, inglés, árabe y, además, está presente en China a través de Sina Weibo, la principal red social en el país asiático. Según explican desde el club, “para Sina Weibo hacemos una comunicación más básica que en el resto de las redes sociales, sobre todo en el sentido de dar a conocer el club, la ciudad y la región. Entendemos que muchos de los seguidores no conocen el club en detalle y estamos intentando dar prioridad a ese contenido específico. Intentamos reflejar que somos un club de cantera con más de 100 años de historia, potenciando los contenidos históricos”.

La gran apuesta por las audiencias internacionales también se pone de manifiesto en el dato ofrecido por el club, donde refleja que el 63% de los seguidores en redes sociales son de fuera de España. El primer territorio con más followers internacionales es China (223.000 seguidores, un 11,2% del total), éxito que se ha conseguido en parte gracias “al apoyo de LaLiga, que ya cuenta con experiencia en China, y eso nos ayuda enormemente”. 

La comercialización de los derechos de televisión, las nuevas tecnologías y, por supuesto, el auge en redes sociales han hecho que los clubes de fútbol europeos encuentren oportunidades de negocio fuera de sus fronteras. En este sentido, el trabajo del CA Osasuna en China ha servido para que el club rojillo “cierre patrocinios en la zona” y que “el departamento de Marketing pueda hablar con empresas del territorio con el bagaje de llevar casi cinco años trabajando la comunicación en chino”.

Otro territorio con un importante número de seguidores es Marruecos. El CA Osasuna se caracteriza por ser un equipo de cantera con muchos jugadores nacionales y, normalmente, pocos extranjeros. Tener un jugador extranjero siempre ayuda en este desarrollo internacional, y la incorporación de Ez Abde este verano ha sido el mejor ejemplo: “Hemos conseguido atraer más de 100.000 seguidores marroquíes en los últimos seis meses. Nos sentimos especialmente orgullosos y queremos seguir atrayendo a todos los fans que se identifiquen con nuestra forma de entender el fútbol allá donde estén”.

Haber superado los 2 millones de seguidores en redes sociales es un éxito para el club si atendemos, además, al hecho de que el terreno digital estaba poco desarrollado. La implicación ha sido clave en el crecimiento: “Todo eso ha supuesto un gran esfuerzo en muy pocos años, porque Osasuna venía de una situación muy complicada y arrastrando bastante retraso en el área digital con respecto a la mayoría de los equipos de LaLiga”. Osasuna nunca se rinde, ni dentro ni fuera del terreno de juego, y menos aún en la parcela digital.